Cómo promover la evaluación de riesgos en la empresa

En esta sesión Liliana Silva, experta en riesgos de Pirani, nos enseña cómo promover la evaluación de riesgos, qué es el análisis de riesgos genéricos, análisis de riesgos específicos del sitio y análisis de Riesgo-Beneficio y Costo-Beneficio.

Evaluación de Riesgos

Promover la evaluación de riesgos en la empresa es esencial para su sostenibilidad, continuidad y éxito. Al implementar estrategias efectivas, se puede crear un entorno empresarial más seguro y resiliente; nos permite identificar, analizar y gestionar los riesgos que puedan afectar el rendimiento y la reputación.

Es un proceso continuo que requiere compromiso y participación de todos los niveles organizacionales.

Promover debe desprenderse desde la alta dirección e ir bajando en sombrilla a todo los niveles de la compañía.

Una vez identificados, es esencial realizar un análisis de impacto. Este proceso permite evaluar la gravedad y la probabilidad de cada riesgo. Implementar un modelo de evaluación ayuda a priorizar los riesgos y asignar los recursos necesarios para su gestión.

Una vez analizados los riesgos, es fundamental desarrollar estrategias de mitigación. Estas pueden incluir la eliminación, reducción, transferencia o aceptación de riesgos. La clave es elegir la estrategia adecuada para cada tipo de riesgo identificado y adaptado a cada proceso de la compañía.

• Análisis de Riesgos Genéricos: Evalúa los riesgos derivados de las actividades laborales para reducir la duplicación de esfuerzos y papeleo.
• Análisis de Riesgos Específicos del Sitio: Considera la ubicación, entorno y personas involucradas en un trabajo para identificar peligros y tomar acciones inmediatas.
• Análisis de Riesgo-Beneficio y Costo-Beneficio: Sopesa los pros y contras de una acción y compara los costos estimados con los beneficios potenciales.

Estrategias para la Evaluación Efectiva

Las estrategias claves incluyen la identificación de riesgos, la evaluación de su impacto y la priorización de acciones. Utilizar herramientas como matrices de riesgos y software especializado puede facilitar este proceso, permitiendo una gestión más eficiente y proactiva.

Adoptar mejores prácticas como la capacitación continua del personal, la revisión periódica de los procedimientos y la integración de la evaluación de riesgos en la cultura organizacional son esenciales. Estas acciones garantizan una respuesta ágil ante cualquier eventualidad.

Es un proceso continuo que requiere compromiso y adaptación.