Para lograr una adecuada gestión de riesgos en las empresas, además de contar con personal calificado y con las herramientas necesarias que faciliten este proceso, es fundamental que exista una verdadera cultura en gestión de riesgos para que todo el personal aporte de manera consciente al logro de los objetivos y a la continuidad y sostenibilidad del negocio.
Aprende más sobre esto y conoce algunas buenas prácticas que te servirán para crear o fortalecer esta cultura en tu organización.
De acuerdo con el Estudio de Gestión de Riesgos en Latinoamérica 2022 que hicimos en Pirani, el 62,7% de los participantes considera que la falta de cultura en gestión de riesgos es uno de los principales riesgos que hoy enfrentan en sus empresas y esto, por supuesto, dificulta el desarrollo de su labor.
Pero ¿de qué hablamos cuando nos referimos a cultura en gestión de riesgos? En términos generales, consiste en el conjunto de valores, creencias, actitudes, conocimientos y comprensión sobre el riesgo que comparten todos los colaboradores e integrantes de una organización, independientemente del área a la que pertenezcan o del rol que desempeñan.
Desarrollar y tener esta cultura es fundamental porque, entre otras cosas, permite que cada persona reporte de manera oportuna cualquier evento, falla o amenaza que pueda generar impactos en la operación o en la continuidad de la empresa.
Igualmente, cuando existe una fuerte cultura en gestión de riesgos, hay mayor posibilidad de que la organización alcance sus objetivos estratégicos porque todos saben qué hacer para prevenir o mitigar los riesgos a los que están expuestos. Y también hay una mayor responsabilidad y sentido de pertenencia.
Como vimos, según el estudio que realizamos en Pirani, en las empresas de la región hace falta una verdadera cultura en gestión de riesgos, es decir, quienes tienen a cargo este proceso, en la mayoría de casos, no sienten que exista entendimiento y compromiso por parte de todas las áreas, es más, no se sienten apoyados e incluso, consideran que aún no se le da el valor que debe tener la administración de riesgos para contribuir a la continuidad.
Sumado a esto, que sin duda representa un riesgo para las empresas porque puede facilitar que los riesgos se materialicen con mayor probabilidad y generen mayores impactos, otras situaciones de riesgo que preocupan a los participantes del estudio son, por ejemplo, cambio regulatorio y cumplimiento normativo, ciberseguridad y fraude y delitos financieros.
Para que todos los colaboradores de la empresa se involucren realmente con la gestión de riesgos, tengan el conocimiento necesario para identificar y reportar a tiempo eventos que puedan afectar la operación, las finanzas, la reputación y la continuidad, es recomendable poner en práctica acciones como:
Adicional a estas buenas prácticas, no está de más implementar una herramienta tecnológica como Pirani que permite a todos los colaboradores involucrarse de una manera más simple y eficiente con la gestión de riesgos para contribuir así tanto al cumplimiento de los objetivos como a la continuidad del negocio a largo plazo.