Guía GAFI actualizada sobre activos virtuales

El Grupo de Acción Financiera Internacional, GAFI, presentó en octubre de 2021 la Guía actualizada para un enfoque basado en el riesgo a los activos virtuales (AV) y proveedores de servicios de activos virtuales (PSAV). La primera versión de esta guía fue publicada en junio de 2019.

En este artículo te contamos sobre el propósito de esta guía actualizada, su estructura y algunos puntos destacados de esta.

Sobre el propósito de la Guía

El uso de activos virtuales, conocidos como criptomonedas, entre los que se destaca principalmente los bitcoins, cada vez más sigue creciendo en el mercado y esto, de acuerdo con el organismo inter gubernamental GAFI, genera oportunidades para que criminales como lavadores de dinero o financiadores del terrorismo lleven a cabo sus actividades ilícitas y las hagan pasar como legales.

Por eso, y teniendo en cuenta los constantes cambios que hay alrededor de los activos virtuales, en 2021 GAFI actualizó la Guía relacionada con este tipo de activos y los proveedores de estos servicios. 

Tal como explica el organismo, el propósito de esta guía actualizada es “ayudar a las autoridades nacionales a entender y desarrollar respuestas regulatorias a las actividades de AV y PSAV cubiertos, incluyendo la modificación de las leyes nacionales, cuando sea aplicable, en sus respectivas jurisdicciones con el fin de abordar los riesgos de lavado de activos y financiamiento del terrorismo asociados a las actividades de AV y PSAV cubiertos”. 

Así mismo, busca ayudar a organizaciones del sector privado que participan en actividades u operaciones de AV a entender cuáles son sus obligaciones en materia de anti lavado de activos (ALA) y contra el financiamiento del terrorismo (CFT) y cómo pueden cumplir los requisitos de GAFI. 

Adicionalmente, esta guía actualizada ofrece a los países, a las autoridades y a la industria en general diferentes pautas para que desarrollen e implementen “un marco de regulación y supervisión ALA/CFT basado en el riesgo para las actividades de AV y PSAV, incluyendo la aplicación de medidas preventivas como la debida diligencia del cliente, el mantenimiento de registros y el reporte de operaciones sospechosas, entre otras medidas”.

Y por último, la Guía explica cómo aplicar las recomendaciones de GAFI a las actividades que involucren AV y PSAV, incluye ejemplos y menciona algunos obstáculos que se pueden presentar al aplicar las medidas de mitigación, así como las posibles soluciones. 

Sobre la estructura de la Guía 

La estructura de esta Guía está compuesta por las siguientes partes:

1. Introducción. Aquí, además de hablar del propósito de la Guía, se específica cuáles son los antecedentes y el alcance de esta.
   
   
2. Alcance de los estándares del GAFI. En esta parte se habla sobre la evaluación de riesgo inicial y sobre las definiciones del organismo y las características del sector de proveedores de servicios de activos virtuales para fines de anti lavado de activos y contra el financiamiento del terrorismo. 
   
   
3. Aplicación de los estándares del GAFI a los países y a las autoridades competentes. Esto en el contexto de los AV y PSAV, además, se explica el enfoque basado en el riesgo a la supervisión o al monitoreo de los proveedores de estos servicios. 
   
   
4. Aplicación de los estándares del GAFI a los PSAV y otros sujetos obligados que participan en actividades de AV. En esta parte de la Guía se habla de medidas como la debida diligencia del cliente, al igual que de las personas expuestas políticamente, las transferencias electrónicas y la “regla del viaje”, entre otros aspectos.  
   
   
5. Ejemplo de países sobre enfoque basado en el riesgo aplicable a los AV y PSVA. La Guía proporciona ejemplos de países en cuanto a la regulación y supervisión de este tipo de actividades y proveedores. 
   
   
6. Principios del intercambio de información y cooperación entre supervisores de PSAV. Es una nueva sección de la Guía, estos principios buscan, entre otros objetivos, brindar una comprensión del tipo de información de supervisión y otros conocimientos que será útil que las autoridades compartan. GAFI aclara que estos principios no son vinculantes para los supervisores. 

Puntos tratados en la Guía

Algunos de los aspectos destacados de la Guía son:

1. Los países deben exigir a los PSAV la identificación, evaluación y adopción de medidas efectivas para mitigar los riesgos de lavado de activos y financiamiento del terrorismo. 
   
   
2. La evaluación de riesgos de los PSAV debe incluir factores de riesgo relevantes como: las clases de servicios, productos o transacciones involucradas; riesgo de cliente; tipos de activos virtuales intercambiados, entre otros. 
   
   
3. Al determinar el nivel de riesgo, los países deben considerar que los usuarios pueden utilizar los AV o los PSAV para realizar pagos o transferir fondos y estos, a su vez, pueden ser el medio ideal para actividades de lavado de dinero y financiación del terrorismo.
   
   
4. Las transacciones entre pares, P2P, es decir, las transferencias de activos virtuales que se realizan sin la participación de un PSAV u otro sujeto obligado, pueden traer riesgos específicos de LA/FT porque pueden utilizarse para evitar los controles de los estándares del GAFI.
   
   Por eso, los países deben entender los riesgos LA/FT asociados a este tipo de transacciones y cómo son utilizadas en sus jurisdicciones, sobre todo cuando hay nuevos tipos de activos virtuales o los existentes alcanzan un uso masivo.
   
   
5. De acuerdo con la Guía, un activo virtual es “una representación digital de valor que se puede comercializar o transferir digitalmente y se puede utilizar para pagos o inversiones”. 

Por su parte, un proveedor de servicios de activos virtuales es “cualquier persona física o jurídica que no esté cubierta en ningún otro lugar en virtud de las Recomendaciones” y realiza una o más de estas actividades:

• Intercambio entre activos virtuales y monedas fiduciarias.
• Intercambio entre una o más formas de activos virtuales.
• Transferencia de activos virtuales.
• Custodia y/o administración de activos virtuales o instrumentos que permitan el control sobre activos virtuales.
• Participación y provisión de servicios financieros relacionados con la oferta y/o venta de un activo virtual de un emisor.

Finalmente, la adopción de las recomendaciones brindadas por GAFI en esta Guía actualizada para un enfoque basado en el riesgo a los activos virtuales y proveedores de servicios de activos virtuales, permitirá tanto a los países como a las organizaciones ayudar a la prevención de los delitos de lavado de activos y financiamiento del terrorismo que pueden ocurrir en este contexto.

Estos delitos, como es bien sabido, no solo afectan la economía mundial, sino también la reputación, el buen nombre y la continuidad de las empresas, por eso, es clave gestionarlos de manera adecuada y oportuna y una herramienta como nuestro software AML Suite puede ayudarte a hacerlo.