Dentro del Sistema de Gestión de Riesgos de Lavado de Activos y Financiación del Terrorismo, el monitoreo transaccional y la generación de alertas cumplen un papel clave para la prevención de estos delitos.
A continuación repasamos de qué se tratan cada una de estas acciones, por qué son importantes y cómo Pirani puede ayudar a tu organización a llevarlas a cabo de una manera simple y eficiente para así detectar a tiempo comportamientos u operaciones inusuales o sospechosas de las contrapartes y evitar un posible involucramiento con el lavado de dinero, el financiamiento del terrorismo o la proliferación de armas de destrucción masiva.
En la gestión de riesgos LAFT, el monitoreo transaccional se trata de hacer un seguimiento constante al comportamiento de las operaciones transaccionales que realiza una contraparte, sean clientes, proveedores, empleados, contratistas, accionistas o socios.
Este monitoreo sirve para determinar si los comportamientos transaccionales de una contraparte a lo largo del tiempo corresponden a su perfil de riesgo, esto es, si está relacionado con su comportamiento histórico normal y no presenta, por ejemplo, grandes cambios en los medios de pago utilizados, el número de ingresos, el monto de compras o de ventas, etc.
En caso de que haya alguna variación significativa, es decir, una operación que se sale del comportamiento normal de la contraparte, gracias al monitoreo es posible generar alertas que sirven para informar sobre esto.
Y a partir de la alerta, que debe configurarse previamente con base a los datos históricos de la contraparte, el analista u oficial de cumplimiento debe analizar qué fue lo que pasó para determinar si se trató solo de una operación inusual (hay una justificación válida en el comportamiento) o si se trata de una operación sospechosa (no tiene justificación) que debe gestionarse como tal.
Y para poder realizar este monitoreo transaccional y generar las alertas adecuadas es necesario apoyarse en herramientas tecnológicas que permitan hacer más simple y eficiente el proceso, pues al tener que manejar y analizar una gran cantidad de información de todas las contrapartes, no puede ser una opción hacerlo manualmente.
Porque no solo se convierte en algo muy operativo sino que también hay mayores probabilidades de cometer errores y de no detectar a tiempo aquellos comportamientos anormales que pueden ser indicio de lavado de activos, financiación del terrorismo o proliferación de armas de destrucción masiva.
Por eso, una herramienta como AML+ de Pirani es una gran opción para realizar un adecuado monitoreo transaccional y crear las alertas que requiere tu organización para así tener una adecuada gestión de riesgos LAFT.
A través de la sección Alertas en AML+, en tu organización pueden realizar el monitoreo transaccional de sus contrapartes y crear alertas automáticas que puedan ser gestionadas oportunamente, previniendo así el riesgo de contagio directo o indirecto.
Las alertas automáticas deben generarse a partir de unas reglas de monitoreo transaccional, es decir, las condiciones o validaciones que va a evaluar la alerta cuando haya cambios en la información normal de la contraparte: si las condiciones se cumplen, la alerta se activa.
En AML+ de Pirani las condiciones para crear las alertas son de dos tipos: tipo comparación y tipo velocidad, ambas son de gran utilidad para el monitoreo.
Las condiciones de tipo comparación permiten comparar diferentes valores, por ejemplo, datos numéricos, tipo fecha y categóricos, ayudando a determinar validaciones que describan patrones conocidos para señales de alerta LAFT. Es importante tener en cuenta que una sola regla de monitoreo puede tener varias condiciones y la combinación de estas es lo que crea la alerta.
Y las condiciones de tipo velocidad, contrario a las anteriores, no son estáticas de un valor por otro valor. Estas lo que permiten es analizar el comportamiento transaccional de la contraparte en determinados periodos de tiempo, por ejemplo, cuántas transacciones generó los últimos tres meses, cuál fue el monto de los productos comprados el último mes, etc. Este tipo de condiciones siempre tienen un rango de tiempo definido.
Las alertas creadas van a cobrar sentido cuando haya una carga masiva de información de las contrapartes. Lo que hace la herramienta AML+ de Pirani es revisar las condiciones de todas las alertas y evaluar en cada una de las contrapartes si estas se cumplen, en caso de que sea así en una o más contrapartes, entonces se activa automáticamente la alerta para que el responsable, generalmente el oficial de cumplimiento, la gestione.
La gestión de las alertas por parte del oficial de cumplimiento consiste en revisar la información y con base en el comportamiento histórico del cliente evaluar y determinar si hubo una operación sospechosa que debe ser reportada ante la Unidad de Información y Análisis Financiero.
Todo esto hace parte del sistema de gestión para la prevención oportuna de los delitos de lavado de dinero, financiamiento del terrorismo y proliferación de armas de destrucción masiva.
¿Quieres conocer más detalles sobre el monitoreo transaccional y las alertas en AML+ de Pirani? Programa aquí una reunión con nuestro personal experto.